Colocan tejido en espacios públicos para concientizar sobre la sordoceguera
Personas con y sin discapacidad se reunieron el pasado viernes en el Centro Integral de Servicios Zapopan (CISZ) para inaugurar la muestra que se instaló como parte de la campaña Grafiti Tejido, que busca hacer un llamado a la población sobre las necesidades de las personas que viven con sordoceguera.
Durante varias semanas, los organizadores de esta campaña de sensibilización convocaron a la sociedad a tejer cuadritos de estambre para colocarlos en espacios públicos, junto con carteles sobre esta discapacidad, con el objetivo de dar a conocer más sobre esta condición en la que viven más de 500 mil personas en México.
En el evento participaron los regidores del ayuntamiento de Zapopan, Erika Díaz y Claudio de Angelis, quienes se manifestaron a favor de que haya una cultura de inclusión y de apoyo a las personas con sordoceguera.
También participó la coordinadora de Grafiti Tejido, a nivel nacional Eneida Rendón Nieblas, egresada de la licenciatura en Gestión Cultural de UDGVirtual, y Darío Rendón Nieblas, coordinador a nivel estatal.
“La Organización Deafblind International, organiza por segundo año consecutivo la campaña Grafiti Tejido por la sordoceguera, una discapacidad única en la que la pérdida parcial o total de la vista y el oído, genera necesidades específicas en la comunicación, el acceso a la información, educación y movilidad, por lo que se requieren sistemas de apoyo específicos e individuales para garantizar su inclusión”, dijo Darío Rendón.
Para colectar los cuadritos, la campaña Grafiti Tejido contó con varios centros de acopio entre los que estuvieron, las distintas sedes de UDGVirtual. La campaña se desarrolla en el marco del Día Internacional de la Sordoceguera, que se conmemora este 27 de junio, aniversario del natalicio de Hellen Keller.
En la inauguración de la campaña también se llevó a cabo la presentación del ballet folklórico “100 corazones”, integrado por niños y jóvenes, con y sin discapacidad.
Número de boletín: 161
Texto y fotografía: Karina Alatorre